Si el objetivo es reformar para alquilar seguro que la propuesta es para conseguir el mayor margen posible de ingresos. Porque una buena reforma podría hacer subir el valor del inmueble y, por lo tanto, permitirnos cobrar letras más altas.
Pero, para que esto suceda tal y como pretendemos, debemos ser comedidos en el gasto, aunque no así en el resultado. Entonces ¿cómo se hace eso? Fácil, con estos sencillos trucos.
Vamos a valorar el inmueble previamente
Antes de ponernos a picar debemos tener un plan claro respecto a lo que podemos hacer. Y, para eso, el primer paso es valorar el estado del inmueble, así como a qué tipo de inquilino o inquilinos podría interesarle.
Si es un inmueble grande, dependerá de su ubicación el que pueda ser familiar o para estudiantes. Y si es más pequeño tendremos que pensar en parejas o personas solas.
También existe la posibilidad de ofrecerlo a turistas o alquilarlo por días. Pero, en este último caso, deberemos incluir un ajuar más completo y ofrecer también menaje y electrodomésticos. Es decir, dejarlo dispuesto para llegar con apenas una maleta de ropa y que no falte de nada.
Y por eso estas decisiones definirán en parte el tipo de reforma que vamos a hacer para poder captar la atención más rápidamente de esos “inquilinos ideales” que pretendemos.
Elaboración del presupuesto
Lo ideal sería contar con un profesional experto o un Home Stager que nos oriente. Pero, aunque tengamos que diseñar nosotros solos todas las mejoras y cambios, necesitamos un presupuesto.
Seguro que habrás valorado cuánto puedes gastarte o hasta qué punto puedes llegar con la reforma. Así, una vez estipulado ese límite, podrás negociar con el arquitecto, el técnico o el albañil, qué es lo que puedes y no puedes costear o juntos, encontrar alternativas más económicas.
Los obligatorios
Dentro de las opciones a tu alcance, hay algunos puntos que no dependen de la estética o la funcionalidad. Por ejemplo, las instalaciones de luz y agua, porque deben renovarse por obligación y seguridad de los inquilinos.
Y me temo que en estos casos no vas a poder trabajar con mucho margen para las variaciones. Pero sí puedes escoger, al menos en la instalación eléctrica, luces LED y formas de iluminación más atractivas y económicas.
Luz indirecta en los pasillos, más lámparas en salón o comedor y una distribución estratégica de los puntos de luz te ayudará a reducir costes.
El siguiente punto incluiría puertas y ventanas, con el objetivo de evitar pérdidas de energía y optimizar el consumo. Pero, antes, asegúrate de que no hay ofertas o subvenciones que cubran estos gastos.
Suelo y azulejos
Hoy en día podemos encontrar soluciones en el mercado que nos evitarán un desembolso alto. Como son las losetas que se pegan o la pintura para azulejos.
Por ejemplo, en el baño podemos cambiar el suelo de forma fácil y con un resultado totalmente nuevo y sorprenderte. Pegando piezas que imiten el azulejo hidráulico, mosaicos o cualquier diseño novedoso.
Y, si colocamos un suelo muy llamativo, podemos completar el diseño con pintura blanca para los azulejos de pared. O, como alternativa, añadir pegatinas solo en algunos azulejos alternos.
Colocar un laminado en el resto de la vivienda es una solución también asequible y que gusta a todo el mundo. Solo escoge colores claros y verás el resultado.
Mobiliario
Olvídate de todos los muebles macizos y murales que tanto apreciaban nuestros padres y abuelos. Aquellos nogales que oscurecían las estancias y ofrecían ese efecto que “espacios llenos” y más pequeños.
Por suerte para ti, podrás encontrar muebles funcionales, baratos y más atractivos. Como los modulares o los que se venden en kit para que los montes tú mismo.
Lo ideal es que sean blancos, porque el efecto será luminoso y más amplia y deja los colores para los detalles.
Y, sobre todo, piensa en ese tipo de “inquilino ideal” del que hablábamos a la hora de escogerlos. Porque, si quieres estudiantes, no hará falta poner ninguna cama de matrimonio, pero sí que tendrás que añadir escritorios en todos los dormitorios.
Valora también si dispones de algún mueble que puedas repintar y emplear igualmente en el piso reformado. Y el mueble de baño ¿se puede pintar o hay que cambiarlo entero?
Entre los muebles de baño hay multitud de opciones y precios, pero también alternativas económicas que no necesitan instalción.
Y otro truco para renovar el mobiliario de forma barata es, además de limpiar y pintar, cambiar los pomos de las puertas y cajones.
Paredes y decoración
La pintura es uno de los recursos más baratos y agradecidos. Y conseguir un efecto “piso nuevo” con un par de manos de blanco es muy sencillo. Pero no improvises en este punto porque el resultado no será tan atractivo.
En la decoración sí que puedes consumir el resto. Incorpora sofás o butacas económicas y de colores agradables, como azules, mostaza o diversos tonos de marrones. Y quizás algún puf divertido, así como alguna alfombra ligera.
Incluye elementos naturales, de mimbre y otras fibras, así como espejos, estanterías y plantas artificiales, muchas plantas.
En MBI Torrent hemos asesorado a muchos clientes con resultados muy positivos, por eso, si quieres una vivienda para reformar, ven a vernos.